Esta es tu última noticia por ver este mes
Ahora puedes acceder a todo el contenido por solo 3€ el primer mes
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
Te quedan noticias por ver en este mes
Te queda 1 noticia por ver en este mes
Ahora puedes acceder a todo el contenido por solo 3€ el primer mes
¿Ya eres suscriptor/a? Inicia sesión
El orden en casa puede empezar por la cocina: las mejores ideas para organizar tu despensa al estilo Marie Kondo. / ZARA HOME
En los últimos meses, 'Tik Tok' e Intagram se han llenado de vídeos en los que puedes ver cómo se rellenan botes, cestas o bandejas organizadoras de todo tipo con ázucar, detergente, latas, macarrones, especias, huevos o casi cualquier artículo. En la mayoría de estos vídeos, el protagonista es el sonido que hacen este sinfín de productos o alimentos al caer dentro de dicho recipiente.
Este fenómeno conocido como 'refill' ('rellenar' en castellano) es casi adictivo para amantes del orden por el gusto que produce escucharlos y la paz que transmite verlos. Yo soy la primera en reconocer que me quedo embobada y maravillada viendo este tipo de vídeos.
Si aún no sabes de lo que te hablo, echa un vistazo a este vídeo:
Una publicación compartida de Organizadora Profesional (@tamaracalvo.op)
Más allá de esta fiebre del rellenado, es importante saber qué tarros o productos de ordenación comprar. Es habitual que, en ocasiones, nos dejemos llevar por modas o por artículos que nos encantan a primera vista sin pensar si nos van a resultar realmente útiles o van a encajar en nuestros espacios del hogar.
Por eso, centrándonos en la despensa, os voy a contar algunos consejos para elegir los botes y tarros de almacenaje adecuados y que te ayudarán a tener una cocina ordenada.
Elige botes en los que entre todo el contenido que vayas a depositar y, para ello, siempre deben ser más grandes. Por ejemplo, si compras un paquete de arroz de 1 kilo, el bote debe de ser mínimo de 1,5 litros.
Utiliza botes con cierre hermético siempre que vayas a almacenar alimentos para que no se estropee la comida y se conserve mejor. En caso de que vayas a depositar productos de lavandería, como detergente o de limpieza, procura que la tapa sea adecuada para soportar el contacto con líquidos y que no se abra con facilidad, sobre todo, si hay niños pequeños en casa.
Si quieres aprovechar al máximo tus armarios o cajones, lo ideal son los botes cuadrados o rectangulares, aunque los de forma redondeada también son una buena opción y a nivel estético quedan genial.
Indistintamente por cuál te decantes, un factor a tener en cuenta, siempre que el espacio de tu despensa lo permita, es que sean apilables para poder colocar uno encima del otro.
Una publicación compartida de Organizadora Profesional (@tamaracalvo.op)
Los tarros transparentes son la mejor opción, puesto que ves lo que hay dentro a simple vista. Los hay de cristal, borosilicato (un vidrio muy resistente a las altas temperaturas y a sus cambios bruscos que se caracteriza por su ligereza) o plástico. Sin embargo, para almacenar café molido, té o similar, lo recomendable es usar recipientes opacos y colocarlos en zonas oscuras.
De todos ellos, existen infinidad de modelos y con tapas de muchos tipos. Aquí es donde entran en juego los gustos y preferencias de cada persona.
Es importante lavarlos regularmente y, cuando lo hagas, hay que dejarlos secar con la tapa abierta. Por supuesto, antes de meter nada asegúrate muy bien de que esté totalmente seco. Puedes pasar un papel de cocina por si acaso.
Antes de rellenarlos, conviene vaciar el contenido del interior y echarlo nuevamente una vez hayas añadido lo que acabas de comprar. De esta forma, abajo quedará lo más reciente y consumirás primero lo antiguo.
Anota la fecha de caducidad en la parte inferior del bote o puedes recortarla y pegarla, sobre todo, de aquellos productos que usas poco. Lo mismo con los tiempos de cocción, ya que quizá en el futuro necesites consultarlos.
El último paso sería poner etiquetas personalizadas en los botes para darle un toque más 'cool' a tu cocina, o al menos en los tarros que pueden dar lugar a dudas para no correr riesgos innecesarios. No sería la primera vez que alguien le echa sal a una tarta por error.
Una publicación compartida de Organizadora Profesional (@tamaracalvo.op)
Espero que estos consejos os hayan ayudado y… ¡bienvenidos al fantástico mundo del rellenado!